La leche se obtiene de vacas de raza autóctona menorquina, que actualmente es muy minoritaria, pero se están haciendo esfuerzos para incrementarla.

La historia del queso menorquín es muy antigua: en la isla se han encontrado restos de cerámica datados en el año 2000 a.C. cuya función parece ser, precisamente, la elaboración de queso.

Escritos árabes del año 1000 también mencionan importantes producciones de queso, vino y carne en Menorca. Se han encontrado documentos de la corona de Aragón que hablan de la importancia de la ganadería y del queso menorquín durante los siglos XV y XVI

Sin embargo, fue durante el período de dominación británica cuando hubo un gran impulso y se dio origen al nombre de “Queso Mahón”.

En el año 1985 se le otorgó, de forma definitiva, la denominación de origen. Posteriormente, en el año 1998 se le incorporó la palabra Menorca, pasando a llamarse Mahón-Menorca.

Durante el tiempo que trabajé y viví en Mallorca e Ibiza una de las cosas más típicas era acompañarlo con sobrasada dulce o sobrasada picante.